Desafíos del liderazgo en los nuevos escenarios organizacionales

lunes, Abril 26, 2021 - 13:03

Por: Xiomara Arias (AES Panamá), María de Gloria Preciado (Arden & Price)

Desde la perspectiva organizacional, la pandemia ha puesto en evidencia la importancia del liderazgo en las compañías y se ha convertido en una plataforma para acelerar la evolución de las organizaciones. 

El desarrollo de un liderazgo basado en competencias como la empatía auténtica, comunicación cercana e interés en la persona, convierte a los líderes en personas motivadoras, proactivas, coherentes que mantienen la tenacidad a pesar de la crisis.

Saber cómo se sienten los colaboradores permitirá tomar decisiones acertadas para garantizar el bienestar de la empresa. La comunicación trasciende de lo laboral y nos ubica en un terreno personal que nos permitirá conocer a profundidad a nuestros colaboradores.

Los contextos individuales son distintos, no todos se han adaptado de la misma forma. Solo podrá lograrse empatía si se tiene conciencia de que cada colaborador asimila de manera diferente un momento como el actual, y que no existen fórmulas generales para ayudar a mejorar su experiencia, esta debe ser personalizada y delinearse a la medida de cada situación y en consonancia con la cultura organizacional.

A consecuencia de las medidas adoptadas frente a una economía que se afectaba cada vez más, surgen tipos de colaboradores en este nuevo proceso organizacional:

  • El colaborador de riesgo: quien sumamente asustado, prefirió ceder al miedo para sentirse seguro, y optó por renunciar.
  • El colaborador con reducción de jornada: cuya remuneración de medio tiempo le causa inconformidad, porque la naturaleza de su puesto le demanda tiempo completo.
  • El colaborador con contrato suspendido: cuyas necesidades básicas no puede cubrir porque no devenga un salario, lo que se traduce en preocupación por su futuro.
  • El colaborador que continuó trabajando: pero agobiado por el estrés debido a que, por la suspensión de sus compañeros, además de realizar sus funciones habituales ejerce funciones adicionales.
  • El colaborador en teletrabajo: al cual le ha tocado lidiar con la responsabilidad de su trabajo y, a la vez, al estar en casa, también tiene que hacerse responsable con las faenas domésticas, añadiendo estrés y ansiedad en su vida.
  • Los líderes: se les exige mantener a flote a la organización, ser su soporte, agarrando fuerte el timón, demostrando fortaleza, pero a la vez viviendo acompañados de la incertidumbre sobre el futuro de la organización.

Vivimos momentos que requieren del toque humano que mueve las organizaciones fortaleciendo nuestros valores y estableciendo una cultura de prácticas empáticas hacia los colaboradores.

Promover una cultura de bienestar integral será clave para hacer sostenibles los resultados de una renovada propuesta de valor al colaborador que contemple salud mental. Será necesario fomentar la confianza de los colaboradores hacia sus líderes y hacia la organización. Balancear las cargas de trabajo, respetar los horarios laborales y el derecho a la desconexión en la figura del teletrabajo, permitirá el adecuado descanso, logrando impactos positivos en el bienestar y productividad.

Un colaborador contento es un futuro embajador de marca para la organización.   El compromiso se verá reflejado en lealtad hacia la empresa, en resultados y aportes.

 

Xiomara Arias,
HR Business Partner     
AES Panamá

 

María de Gloria Preciado,
Gerente de Desarrollo Organizacional
Arden & Price